“Ciudadanos pondrá medidas para trabajar por la regeneración democrática y proteger a los delatores de actividades corruptas”. Así lo aseguró hoy el candidato de Ciudadanos al Congreso por Cantabria, Félix Álvarez, durante su visita a Reinosa, donde estuvo acompañado por el diputado regional, Juan Ramón Carrancio y el delegado territorial, Jesús Calleja.

“Los delatores anónimos de actividades corruptas e irregularidades ante una unidad de investigación y represión de la investigación estarán protegidos por el Estado de forma efectiva”, comentó Álvarez. Además, se establecerán incentivos positivos para los denunciantes una vez que se compruebe la existencia de la corrupción o infracción mediante gratificaciones que puede pasar por una parte del dinero recuperado. Igualmente, se impedirá que el gestor público utilice los fondos de los contribuyentes contra el denunciante de la corrupción.

“Es necesario crear equipos multidisciplinares para luchar contra la corrupción por medio de inspectores de Hacienda, policías, fiscales y hacer efectivo el resarcimiento patrimonial o indemnización por los daños ocasionados al erario público”, incidió el número uno al Congreso de Ciudadanos.

Asimismo, Ciudadanos considera que se deben eliminar los aforamientos de los políticos. “Suprimiremos los aforamientos y suplicatorios de diputados y senadores, salvo para delitos relacionados con la actividad política del parlamentario y para todos los cargos electos, y estableceremos un régimen de incompatibilidades con verdaderas garantías de control y sanción”, especificó Félix Álvarez, quien añadió que la imputación formal sea una causa de cese inmediato en los cargos de libre designación.

El partido naranja apuesta por modificar la Ley del Indulto, de tal forma que solo se pueda llevar a cabo en hechos puntuales y en ningún caso aquellos ligados a la corrupción política, en contra de los informes técnicos del expediente o del criterio del tribunal sentenciador.

Para el partido naranja se debe reforzar las incompatibilidades, de modo que aquellas personas que hayan ocupado cargos públicos de relevancia no puedan durante un plazo prudencial trabajar para la empresa privada en los sectores en los que ha tomado decisiones durante su cargo público.
Además, se debe eliminar que los jueces y fiscales pasen de cargos políticos a de libre designación en la justicia o fiscalía.

Otra necesidad para regenerar la política pasa por el hecho de que en las mesas de contratación no puede haber ningún político y deberán estar formadas sólo por técnicos que estudien el proyecto. “Deberán ser otros que adjudiquen las obras y servicios en base a la imparcialidad de la Administración y cumpliendo los criterios de concurrencia y publicidad”, comentó Félix Álvarez.

Para finalizar, Álvarez avanzó que se suprimirán las diputaciones provinciales, garantizando unos mejores servicios públicos, más baratos y sin corrupción. “Las diputaciones provinciales son entes de dudosa utilidad, escaso control democrático y foco de corrupción. Debemos promover el recorte de duplicidades, chiringuitos políticos y gastos superfluos, en lugar de seguir recortando el Estado del Bienestar. Esta medida no afectará a las diputaciones forales, cabildos ni consejos insulares”, subrayó.