El partido de Ciudadanos en Cantabria contará en breve con un Comité Autonómico como parte de su estructura y que servirá para tomar decisiones sobre actividades e iniciativas que se lleven a cabo y para coordinar el proyecto en esta Comunidad Autónoma.
Así lo anunció el delegado Territorial, Jesús Calleja, quien señaló que el objetivo del partido es crecer y consolidarse ante el reto de las próximas elecciones municipales y autonómicas en las que pretenden convertirse en una alternativa de gobierno.
El Comité Autonómico estará formado por hasta cinco de los miembros electos más representativos del partido en las instituciones y otros cinco integrantes nombrados por el partido desde Madrid, entre los que se encuentran el portavoz del partido, así como los secretarios de Comunicación, Acción Institucional, de Programas y Áreas Sectoriales, de Relaciones Institucionales y de Organización Autonómico, anteriormente delegado Territorial.
A ellos se unen los nueve coordinadores elegidos en las agrupaciones del partido en Cantabria: Javier Arcocha, en Castro Urdiales; Lidia Laso, en Santoña; Pedro Luis Alonso, en Centro Oriental; Pedro Miguel Herrera, en Camargo; Graciela Gómez, en Santander; Alejandro Sierra en Santa Cruz de Bezana; Ruth Pérez en la zona Occidental; Agustín Prieto en Torrelavega, y Evelina Sota, en Piélagos.
Las juntas directivas de las nueve agrupaciones de Cantabria se han renovado recientemente y tan solo en dos, Santander y Occidental, se han presentado dos candidaturas, mientras que en el resto hubo una lista de consenso. En el caso de Santander, la candidatura liderada por Graciela Gómez se impuso a la encabezada por Javier López, mientras que la zona Occidental, Ruth Pérez venció a Dan Menéndez.
Jesús Calleja explicó que estas agrupaciones tienen cierta independencia para adaptar las decisiones que tomé el Comité Autonómico a las particularidades de sus municipios o comarcas
La renovación de estas agrupaciones se ha llevado a cabo tras la celebración de la Cuarta Asamblea Nacional de Ciudadanos, de tal forma que el Estatuto recoge que todos los cargos orgánicos deben elegirse de nuevo.